El ganador de las elecciones estadounidenses del pasado 5 de noviembre, Donald Trump, tiene previsto tocar la campana de apertura de la Bolsa de Nueva York este jueves. El nuevo presidente electo, quien ha prometido revitalizar la economía norteamericana, logrará así una nueva fotografía histórica en uno de los iconos del capitalismo global. Los planes del republicano para su visita a Wall Street fueron confirmados por personas familiarizadas con su agenda, según afirma la agencia Bloomberg, quienes hablaron bajo condición de anonimato ya que los planes aún no se han hecho públicos..
La Bolsa de Nueva York es un escenario apropiado, afirma su entorno, para un presidente electo que constantemente recurre a las subidas en el mercado de valores como validación de sus políticas económicas. Durante su primer mandato, las acciones de los gigantes tecnológicos norteamericanos vivieron un rápido aumento, lo que Trump atribuyó a su legislación de recortes fiscales masivos.
Las encuestas postelectorales señalan que los votantes norteamericanos favorecieron a Trump frente a su rival, la demócrata Kamala Harris, en parte debido a sus promesas de dinamizar la economía mediante la desregulación y nuevos recortes de impuestos. Aunque los mercados continuaron desempeñándose bien bajo la actual administración Biden, el republicano ha insistido con frecuencia que los buenos resultados electorales se debían a la expectativa de los inversores de que él volvería a la Casa Blanca. Por lo pronto, el índice S&P 500 se ha disparado después de la victoria republicana, aunque los mercados miran con atención las amenazas de nuevos aranceles generalizados a importantes socios comerciales.
La Bolsa de Nueva York invita regularmente a celebridades y líderes corporativos a participar en la ceremonia de apertura del mercado, particularmente para conmemorar aniversarios y ofertas públicas iniciales. Durante el primer mandato presidencial de Trump, su esposa, la entonces primera dama Melania Trump, tocó la campana para promover su iniciativa “Be Best” contra el acoso infantil.
La tradición se remonta a 1956, cuando Leonard Ross, un niño de 10 años ganador de un concurso televisivo, fue invitado a tocar la campana tras responder correctamente preguntas sobre el mercado de valores, según la NYSE.
