Uno de los cambios más evidentes está en su diseño. Este es diferente en algunos apartados lo que es habitual en Redmi, y claro ejemplo de lo que decimos es que los sensores de la cámara trasera están perfectamente integrados en el terminal, algo que no es precisamente habitual en el fabricante. Además, se incluye la serigrafía en la carcasa que también le da un toque bastante particular.
Por otro lado, es importante mencionar que las dimensiones y el paso son bastante adecuados para ofrecer una buena ergonomía, ya que esto son los siguientes: 161,11 x 74,95 x 7,9 milímetros y 181 gramos. Nada mal para un terminal que, entre otras cosas, cuenta con una batería de 5.000mAh para asegurar una muy buena autonomía (y que incluye una carga rápida de 67W, que es una marca bastante notable).
La compañía ha incluido unos componentes que aseguran un rendimiento bastante bueno. Así, por ejemplo, el procesador es un Snapdragon 7+ Gen 2, que es bastante potente y llega a niveles de los Snapdragon 8 de primera generación, lo que ya es bastante indicativo. Por otro lado, lo más destacable en lo que tiene que ver con el hardware es todo lo que tiene que ver con la memoria. La RAM puede llegar a los 16GB -desde los ocho- y, en lo que tiene que ver con el almacenamiento, las opciones son muy llamativas debido a que existirá una variante de 1TB.
En lo que tiene que ver con la pantalla, también hay excelentes noticias en este Redmi Note 12 Turbo, ya que la elección es una con panel OLED de 6,7 pulgadas. Si a esto se le suma que la resolución es Full HD+ y que permite utilizar una frecuencia de hasta 120Hz, está claro que la calidad de imagen es alta y cumple con cualquier propósito. También se cumple perfectamente en lo referente a la cámara, ya que se incluye en la trasera tres sensores de 64 + 8 + 2 megapíxeles, incluyendo el primero estabilización óptica y la posibilidad de realizar grabaciones a 4K. Más que suficiente para la mayoría de los usuarios.
