OpenAI ha anunciado el lanzamiento de su modelo GPT-4.5, uno de los productos más esperados en el mercado de la inteligencia artificial generativa. Sin embargo, este lanzamiento, que llega dos años después de la introducción de GPT-4, ha generado algunas dudas de la capacidad que tiene la compañía para mantenerse a la vanguardia en una industria que ella misma ayudó a impulsar.
Sam Altman, CEO de OpenAI, no escatimó elogios al hablar de las mejoras de GPT-4.5. En un tuit publicado el mismo día del lanzamiento, este describió el nuevo modelo como la primera IA que «se siente como hablar con una persona reflexiva“, y confesó haberse quedado ”asombrado» por los «buenos consejos» que ofrece. Además, la compañía destacó que los evaluadores de GPT-4.5 consideraron que este modelo posee un mayor “EQ” (inteligencia emocional) en comparación con sus predecesores. También se mencionó que GPT-4.5 es menos propenso a “alucinar”, es decir, a inventar información, un problema que ha perseguido a los modelos anteriores.
No obstante, Altman y su equipo también se encargaron de moderar las expectativas. «Este no es un modelo de razonamiento y no superará todos los benchmarks“, advirtió el CEO, describiendo a GPT-4.5 como una ”inteligencia de tipo diferente“. La propia OpenAI enfatizó métricas más cualitativas para evaluar las mejoras del nuevo modelo, como una salida de texto que “se siente más natural” y una “capacidad mejorada para seguir la intención del usuario”.
GPT-4.5 avance, pero sin grandes sorpresas
La ambivalencia de OpenAI respecto a su último modelo quedó en evidencia incluso en la descripción técnica de GPT-4.5. En el documento técnico publicado, la marca señaló que «GPT-4.5 no es un modelo frontera» (término que se refiere a sistemas de IA que representan el límite de la capacidad tecnológica actual). Curiosamente, horas después, esta línea fue eliminada del documento sin explicación alguna.
Además, OpenAI admitió que todavía está evaluando si ofrecerá GPT-4.5 como una API a largo plazo, debido a los altos costes operativos. Actualmente, el nuevo modelo se ofrece a precios entre 15 y 30 veces superiores a los de GPT-4o, lo que plantea dudas sobre su viabilidad comercial a gran escala. En muchos sentidos, esta llegada curiosamente marca el final de una era para OpenAI. Como Altman anunció a principios de mes, este modelo, conocido internamente como “Orion”, es el último que se construirá utilizando el método de “preentrenamiento” que impulsó el éxito de ChatGPT (la “P” en GPT significa “preentrenado”). Este enfoque implica crear modelos cada vez más grandes y alimentarlos con cantidades crecientes de datos, un proceso costoso y complejo.
Por cierto, es importante mencionar que GPT-4.5 estará disponible inicialmente para los usuarios del servicio ChatGPT Pro, que cuesta 200 dólares al mes, aunque no se ofrecerá a otros usuarios hasta la próxima semana. Altman explicó que esto se debe a la limitada capacidad de computación disponible en este momento.
¿Un salto adelante o un paso lateral?
Aunque GPT-4.5 supera significativamente a GPT-4o en varias pruebas de referencia, especialmente en aquellas que involucran respuestas precisas a preguntas de conocimiento general, su rendimiento en otras áreas, como la resolución de problemas en múltiples idiomas, solo muestra mejoras marginales. Además, en tareas relacionadas con matemáticas, codificación y lógica, muchos usuarios que han testeado el desarrollo han reportado que GPT-4.5 no supera a modelos de razonamiento ya disponibles, como el modelo R1 de la startup china DeepSeek.
En comparación con el modelo Claude 3.7 Sonnet de Anthropic, presentado esta misma semana, GPT-4.5 parece quedar rezagado. El motivo es que el primero combina las respuestas rápidas e “intuitivas” de los modelos estilo GPT con opciones más deliberativas y precisas propias de los modelos de razonamiento. Este último decide, en función de la solicitud del usuario, si puede responder rápidamente o si necesita un proceso más reflexivo, conocido como “cadena de pensamiento”, para llegar a una solución. GPT-4.5 carece de esta capacidad.
La falta de un avance claro y generalizado en el rendimiento de GPT-4.5 lleva a cuestionar su verdadero impacto. Gary Marcus, científico cognitivo y experto en IA de la Universidad de Nueva York, calificó el modelo como un «nada nuevo“. Incluso se han compartido en redes sociales datos de benchmarks relativamente débiles, acompañados de comentarios como ”dime que no estoy viendo esto“.
Los modelos de razonamiento parten de modelos preentrenados, pero utilizan un método llamado aprendizaje por refuerzo para enseñar a la IA a generar una secuencia de pasos lógicos que conduzcan a una respuesta correcta. Este proceso, conocido como “cadena de pensamiento”, puede incluir la “autorreflexión” del modelo para mejorar su proceso y llegar a la mejor solución. Y, este, parece que apunta a ser el futuro.
El caso es que el lanzamiento de GPT-4.5 deja en claro que OpenAI ya no tiene la ventaja indiscutible que alguna vez tuvo en la carrera de la IA. Usando una analogía ciclista, OpenAI sigue en el pelotón, pero, al menos por ahora, el maillot amarillo parece haber pasado a manos de Anthropic. Además, otras compañías como DeepSeek, Google y Meta están demostrando ser competidores capaces de ganar la carrera.
