Las gafas de realidad aumentada que prepara Apple y que todo apunta a que podrían llegar antes de que acabe este año 2023. Una de las nuevas informaciones que han aparecido indica que no sería necesario utilizar un ordenador para controlarlas. Y, esto, es realmente positivo.
Por regla general, este tipo de dispositivos, por la ausencia de un hardware integrado muy avanzado, necesita de un equipo potente conectado (con o sin cables), para poder realizar todas sus acciones con una adecuada experiencia de uso. Y, por lo que se ve, en Apple han dado con la solución para no tener que estar amarrado a un Mac al utilizar las Reality Pro, ya sea un portátil o sobremesa. Y, lo cierto, es que tiene todo el sentido del mundo lo que se ha pensado.
El trabajo, que se ha patentado ya, tendría por objetivo prescindir de los ordenadores y, en su lugar, utilizar un iPhone o un tablet iPad. Lo cierto es que las últimas generaciones de estos dos productos ofrecen una potencia muy alta, por lo que serían más que suficientes para poder realizar todo tipo de trabajos sin que se note una bajada de rendimiento -o retardo en el funcionamiento-. Además, el nombre de la herramienta podría estar ya elegido: Apple Continuity.