La noche del lunes fue testigo de un nuevo paso adelante para SpaceX, la compañía aeroespacial fundada por Elon Musk, debido al lanzamiento exitoso de la misión Bandwagon-3 desde la emblemática plataforma de Cabo Cañaveral, Florida. A las 8:48 p.m. hora del Este, el cohete Falcon 9 despegó puntualmente, iluminando el cielo y marcando un avance más en la democratización del acceso al espacio debido a que hablamos de una acción internacional.
Una misión colaborativa que une a distintos actores internacionales
En esta ocasión, el Falcon 9 transportó tres cargas útiles principales: el satélite 425Sat-3 de la Agencia de Desarrollo para la Defensa de Corea del Sur (ADD); el Tomorrow-S7 de Tomorrow Companies Inc.; y, adicionalmente, la cápsula de reentrada Phoenix de Atmos Space Cargo, una empresa alemana especializada en tecnologías espaciales. Cada uno de estos dispositivos cumple funciones específicas y estratégicas:
Un lanzamiento transmitido en vivo y seguido en todo el mundo
425Sat-3: este es un satélite de reconocimiento desarrollado por la Agencia de Desarrollo para la Defensa de Corea del Sur, diseñado para mejorar la vigilancia y la seguridad nacional.
Tomorrow-S7: en este caso hablamos de un satélite de Tomorrow Companies Inc., orientado a la recopilación de datos meteorológicos, clave para la investigación climática y la gestión de desastres naturales.
Phoenix: esta cápsula de reentrada de Atmos Space Cargo, fabricada en Alemania, cuyo objetivo es validar tecnologías de reentrada y probar un innovador escudo térmico inflable. Tras completar sus experimentos en órbita, está programada para reingresar y amerizar en el Atlántico, frente a las costas de Brasil. Si la misión resulta exitosa, será el primer intento privado europeo de reentrada desde órbita.
SpaceX, fiel a su estilo, transmitió en directo los primeros minutos del lanzamiento a través de sus plataformas digitales. Las imágenes del Falcon 9 ascendiendo y atravesando la atmósfera son como siempre muy llamativas, y no dejan de reafirmar el renovado interés global por la exploración espacial y el papel protagónico de la empresa en este sector.
Recuperación exitosa del propulsor de SpaceX
Uno de los aspectos más destacados de la misión Bandwagon-3 fue la recuperación exitosa de la primera etapa del cohete Falcon 9. Tras la separación, el propulsor regresó de manera controlada y aterrizó en la Zona de Aterrizaje 2 (LZ-2) de Cabo Cañaveral. Este logro representa la tercera vez que este propulsor específico es utilizado, habiendo participado previamente en las misiones O3b mPOWER-E y Crew-10.
Con este aterrizaje, SpaceX suma ya 435 recuperaciones de cohetes de clase orbital, consolidando su liderazgo en reutilización y reducción de costes en la industria espacial.
El programa SmallSat Rideshare de SpaceX
La misión Bandwagon-3 se enmarca dentro del programa SmallSat Rideshare de SpaceX, una iniciativa que permite a operadores de pequeños satélites compartir un mismo lanzamiento. Este modelo de viaje compartido ha transformado la economía de las misiones espaciales, ya que posibilita que cargas útiles de tan solo 50 kilogramos (110 libras) accedan al espacio por alrededor de 300.000 dólares.
Gracias a esta estrategia, empresas emergentes, universidades y agencias gubernamentales pueden poner en órbita sus proyectos sin necesidad de asumir los elevados costes de una misión exclusiva.
Hasta la fecha, SpaceX ha realizado un total de 16 misiones dedicadas a rideshare: 13 bajo el nombre Transporter, dirigidas a órbitas polares; y 3 bajo la denominación Bandwagon, orientadas a órbitas de inclinación media. Este esquema ha permitido que decenas de proyectos científicos, tecnológicos y comerciales se conviertan en realidad, impulsando la innovación y el desarrollo de nuevas aplicaciones espaciales.
